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Los huevos: una solución nutricional para combatir la desnutrición infantl

La desnutrición infantil es un problema grave en Latinoamérica y en todo el mundo. A continuación, se presentan algunas estadísticas que resaltan la magnitud de este desafío:
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  • Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), aproximadamente 11,3% de los niños menores de 5 años en la región padecen desnutrición crónica, también conocida como retraso en el crecimiento. 
  • En América Latina, se estima que alrededor del 3,9 millones de los niños menores de 5 años padecen sobrepeso.
  • La desnutrición infantil tiene consecuencias graves en la salud y el desarrollo de los niños. Puede provocar retraso en el crecimiento físico y cognitivo, debilitamiento del sistema inmunológico y aumento del riesgo de enfermedades.
  • La desnutrición infantil también está estrechamente relacionada con la pobreza y la falta de acceso a una alimentación adecuada. Los niños de familias con bajos ingresos tienen mayor riesgo de sufrir desnutrición.
  • Estas estadísticas subrayan la importancia de abordar la desnutrición infantil de manera efectiva. La inclusión de alimentos nutritivos, como los huevos, en la alimentación de los niños puede desempeñar un papel significativo en la lucha contra este problema y en mejorar el estado de nutrición de los niños en Latinoamérica.
 
La falta de una alimentación adecuada durante los primeros años de vida puede tener consecuencias devastadoras para el desarrollo físico y cognitivo de los niños. En este contexto, se ha planteado la pregunta de si los huevos pueden ser una solución para combatir la desnutrición infantil. Basándonos en investigaciones recientes, encontramos evidencia que sugiere que los huevos pueden desempeñar un papel importante en el abordaje de la desnutrición en los niños, tanto en Estados Unidos como en Latinoamérica.
 
Beneficios de los huevos para abordar la desnutrición infantil:
Un estudio realizado en Estados Unidos encontró que la introducción temprana de los huevos en la alimentación de los niños está asociada con una menor medida de adiposidad en niñas adolescentes y con un menor riesgo de retraso en el crecimiento. Estas asociaciones no se observaron en los niños varones, pero los resultados sugieren que los huevos podrían tener un efecto positivo en la composición corporal y el crecimiento de los niños durante la infancia temprana.
 
Además, los huevos son una fuente valiosa de nutrientes que a menudo se consumen en cantidades insuficientes, como la vitamina D, la vitamina A, las proteínas y la colina. La falta de consumo adecuado de estos nutrientes es común en niños y adolescentes de Estados Unidos y puede contribuir a la malnutrición. Los huevos pueden proporcionar una cantidad significativa de estos nutrientes, lo que los convierte en una opción alimentaria beneficiosa para abordar las deficiencias nutricionales en los niños.
 
Importancia de los huevos durante el embarazo:
El desarrollo cerebral es especialmente rápido durante los primeros 1.000 días, desde la concepción hasta los 24 meses de edad. Durante este período crítico, la nutrición adecuada juega un papel fundamental en el desarrollo neurocognitivo y físico de los niños. Los huevos, junto con los nutrientes que contienen, como la colina, la luteína/zeaxantina y el ácido docosahexaenoico (DHA), han demostrado tener asociaciones sinérgicas con el neurodesarrollo fetal. Esto sugiere que los huevos aportan un valor nutricional más allá de la suma de sus partes.
 
Investigaciones recientes han encontrado una interacción significativa entre la ingesta de colina y la ingesta de luteína/zeaxantina, así como entre la colina, la luteína/zeaxantina y el DHA, que se relaciona con la maduración cerebral fetal. Estos hallazgos respaldan la recomendación de incluir los huevos en la alimentación de las mujeres embarazadas.
 
Conclusiones:
Los huevos pueden desempeñar un papel importante en la lucha contra la desnutrición infantil. Su introducción temprana en la dieta de los niños puede tener efectos positivos en la composición corporal, el crecimiento y el desarrollo cognitivo. Además, los huevos son una valiosa fuente de nutrientes esenciales que a menudo se consumen en cantidades insuficientes. En el caso de las mujeres embarazadas, los huevos y los nutrientes que contienen pueden contribuir al desarrollo saludable del cerebro fetal. Sin embargo, es importante destacar que los huevos deben consumirse como parte de una dieta equilibrada y variada, y que otros alimentos también desempeñan un papel fundamental en la nutrición infantil. La combinación de una alimentación adecuada y la promoción de prácticas de cuidado infantil y de salud son clave para abordar de manera integral la desnutrición en la infancia.
 
Elaborado por:
Sandra Wages Young
Lic. en Nutrición y Dietética 

Fuentes: